CGT se concentra frente a las sede de FAE Burgos en contra del encarecimiento general y sostenido de los precios que ahogan a la clase trabajadora.

Para CGT el encarecimiento sostenido de los precios está penalizando terriblemente a la clase trabajadora, en especial a aquellas personas que reciben las rentas más bajas. Si en 2021 acabamos el año con un IPC del 6,5%, en lo que llevamos de 2022 el IPC se ha situado ya por encima del 10%. El invierno está a la vuelta de la esquina y el coste de la energía eléctrica se ha disparado aún más que a finales del año pasado.
El transporte ha sufrido un incremento de más del 16,2%, pese a las medidas del plan de choque. La vivienda sigue subiendo a una tasa anual del 23% respecto del año anterior. Como resultado de todo esto, en la actualidad hay un 43% del inquilinato (3,2 millones de personas) que pertenecen a hogares en riesgo de pobreza o exclusión social. Los alimentos suben un 13,5% respecto al año anterior.
Los convenios pactados hasta junio de 2022 cubren a más de 7.119.0000 personas, siendo la subida salarial pactada promedio del 2,6%. Es decir, ya se han pactado más de 2.540 convenios en lo que va de año con una inflación promedio del 9 %. Esto quiere decir que se institucionaliza una pérdida salarial de forma generalizada del 6,6% hasta agosto.
CGT avisa que la clase trabajadora no puede contemplar esta tremenda agresión sin dar un paso al frente. Para el sindicato la línea de actuación es clara, es momento de luchar y de reclamar soluciones y remedios más justos a la subida de precios, frenar el estrangulamiento que se está perpetrando sobre la clase trabajadora.