Mañueco asegura en su toma de posesión como presidente de la Junta que será siempre fiel con el Gobierno y exigente en la defensa de los intereses de la Comunidad.

Alfonso Fernández Mañueco ha tomado posesión como presidente de la Junta de Castilla y León, dice convencido de que el futuro de la Comunidad va a ser brillante, pese a las dificultades y retos por delante. A pesar del ambiente enrarecido con las presencias y sobre todo ausencias como la del presidente del PP, en la toma de posesión se han visto claramente las dos partes que va a tener este gobierno con la extrema derecha y el PP. Parece que condenados a entenderse pero que sin duda, por las exigencias de unos y cesiones de otros no va a ser para nada fácil.
Si hay una palabra que define su relección esa es la desconfianza mutua que se tienen y resulta evidente y por tanto que generan cara al exterior.
Tras ser investido por mayoría absoluta el pasado 11 de abril por el Pleno de las Cortes como presidente, Fernández Mañueco ha ofrecido al frente de su nuevo Gobierno moderación, diálogo, tolerancia, integración y espíritu abierto y constructivo que permita el enriquecimiento con la diversidad de opiniones y el debate público.
Un primer retroceso en este nuevo gobierno es la representación femenina que contara únicamente con 3 mujeres.
En cuanto a la representación Burgalesa, en primer lugar esta Juan García-Gallardo Frings como Vicepresidente, aunque hay que destacar que va por las listas de Valladolid y Alejandro Vázquez Ramos que sigue en la Consejería de Sanidad.
Se cae del gobierno Ángel Ibáñez Hernando que deja la Consejería de la Presidencia para ocupar la viceportavocía del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla y León.